Pep Coll, 69 x 48 cm, litografía. Composición abstracta dónde el único elemento reconocible sería el elemento central que se asemeja a una luna. Desde el punto de vista cromático, el artista utiliza una paleta de colores primarios que contrastan entre sí, tonalidades cálidas como el rojo anaranjado y el amarillo frente a tonalidades frías como el azul y el negro.
Esta obra presenta características formales similares a las dos litografías que realizó el artista para la carpeta litográfica ''Palma'' en 1989 junto con otros artistas como Joan Vich, María Carbonero, Joan Rafel, etc., Coll se inscribe dentro de la abstracción lírica, en sus composiciones el color predomina sobre la forma y éste es la vía de expresión de sus sentimientos y emociones. Las figuras de Kandinsky y Paul Klee son clave en la trayectoria del artista. La obra se encuentra en buen estado, presenta enmarcación. Se perciben algunas marcas del paso del tiempo.
Pep Coll, 69 x 48 cm, litografía. Composición abstracta dónde el único elemento reconocible sería el elemento central que se asemeja a una luna. Desde el punto de vista cromático, el artista utiliza una paleta de colores primarios que contrastan entre sí, tonalidades cálidas como el rojo anaranjado y el amarillo frente a tonalidades frías como el azul y el negro.