Jacques Rigaud, 29 x 37 cm, grabado original a punta seca. Se representa una carrera que tiene lugar en un valle protagonizada por un grupo de hombres semidesnudos, posiblemente esclavos. En los extremos del sendero dos grupos de personas, que parecen divertirse a su costa, observan la escena. Los espectadores visten trajes característicos del siglo XVIII. Se observan dos personajes sentados entre el grupo del extremo izquierdo que se encuentra delante de unas ruinas arquitectónicas, posiblemente pertenezcan al estamento nobiliario por el hecho de ser los únicos sentados, además de estar rodeados por su comitiva: músicos, sirvientes, bailarinas, etc. En lo alto de la colina se observan edificios de una urbe.
Jacques Rigaud fue un grabador francés del siglo XVIII, especializado en vistas topográficas. Obtuvo un privilegio general por su obra en 1728 que publicó bajo el título ''Recueil choisi des plus belles vues des palais, châteaux et maisons royales de Paris et des environs''. Trabajó en Inglaterra para Bridgeman en Stowe y Burlington en Chiswick. A través de sus dibujos solía representar vistas urbanas panorámicas y, en menor medida, paisajes campestres. Sus obras muestran el gran dominio y destreza técnica del dibujo, las composiciones presentaban formato horizontal en las que aplicaba la perspectiva científica con el punto de fuga en el centro que les otorgaba este efecto tan bien logrado de profundidad. Por lo general, estas vistas se caracterizaban por la presencia de la arquitectura palatina monumental con sus característicos tejados de pizarra y mansardas de la época que muestran la tendencia clasicista del periodo barroco en Francia y la presencia de personajes paseando. Actualmente se encuentran diversos grabados del autor en instituciones emblemáticas como el Metropolitan Museum of Art, el British Museum y la Royal Collection Trust. El grabado se conserva en muy buenas condiciones, además presenta enmarcación en chapa de caoba con hilo de argento y plata.
Jacques Rigaud, 29 x 37 cm, grabado original a punta seca. Se representa una carrera que tiene lugar en un valle protagonizada por un grupo de hombres semidesnudos, posiblemente esclavos. En los extremos del sendero dos grupos de personas, que parecen divertirse a su costa, observan la escena. Los espectadores visten trajes característicos del siglo XVIII. Se observan dos personajes sentados entre el grupo del extremo izquierdo que se encuentra delante de unas ruinas arquitectónicas, posiblemente pertenezcan al estamento nobiliario por el hecho de ser los únicos sentados, además de estar rodeados por su comitiva: músicos, sirvientes, bailarinas, etc. En lo alto de la colina se observan edificios de una urbe.