Josep Coll Bardolet, 29.7 x 42 cm, acuarela y guache sobre papel. En esta obra se observan a tres payeses mallorquines (dos mujeres y un hombre) bailando "ball de bot", seguramente en una fiesta por el gran colorido del fondo (pinceladas rápidas de colores vivos y alegres). El trazado es rápido y los personajes no tienen rostro; la iluminación, realizada con acuarela y guache, usa colores puros tales como el rojo, el azul, el verde y el amarillo. Es una obra en la que el artista ha captado la esencia del baile y de la fiesta dándole importancia a las impresiones seguramente de una vivencia propia.
Las obras de Coll Bardolet destacan por la vitalidad que desprenden y, en este caso en particular con esta temática costumbrista mallorquina no sólo denota vitalidad, sino que demuestra su pasión y amor por Mallorca y sus tradiciones (se afincó en Valldemossa desde 1943 hasta que falleció en 2007). Entre 1980 y 2007 que es, según como apunta la fundación cultural Coll Bardolet de Valldemossa, la horquilla cronológica en la que se realizó esta obra; realizó su primera exposición antológica en la Llotja de Palma (1980), también fue declarado hijo ilustre de Valldemossa (1987), donó obras al Museu de Lluc, recibió la Medalla de Oro de las Illes Balears y fue nombrado “Chevalier de l'Ordre de la Couronne” de la Casa Real Belga. En 1988 fue nombrado “Cantaire d'honor” de la coral de la Universitat de les Illes Balears e inauguró la Pinacoteca Coll Bardolet en Campdevánol -su lugar de nacimiento-.
Esta obra está en perfecto estado y presenta un marco con cristal plateado. Recomendaríamos usar vidrio museo TRU UV70.
Josep Coll Bardolet, 29.7 x 42 cm, acuarela y guache sobre papel. En esta obra se observan a tres payeses mallorquines (dos mujeres y un hombre) bailando "ball de bot", seguramente en una fiesta por el gran colorido del fondo (pinceladas rápidas de colores vivos y alegres). El trazado es rápido y los personajes no tienen rostro; la iluminación, realizada con acuarela y guache, usa colores puros tales como el rojo, el azul, el verde y el amarillo. Es una obra en la que el artista ha captado la esencia del baile y de la fiesta dándole importancia a las impresiones seguramente de una vivencia propia.