Bernardí Celiá, 32.7 x 21, 7 cm, grafito sobre papel. Es un retrato de un personaje masculino. La composición es de un primer plano en el que el punto focal es el rostro. Con un trazo rápido y, presuntamente, continuo; Celiá ha elaborado un retrato rápido y expresivo. Todo el retrato parece abocetado, la nariz, los ojos, las cejas y la boca son insinuados.
Usualmente al hablar de la obra de Bernardí Celiá nos centramos en sus obras paisajísticas de Mallorca, ya que la ha recorrido y plasmado en todos los ámbitos posibles con diferentes tendencias tales como la abstracón en los años 60, el expresionismo en los 70 y el posimpresionismo en los 80.
En este caso en concreto, es un dibujo retrato. Debemos de tener en cuenta que este autor, sí que realizó retratos y dibujos, pero no son las obras más abundantes dentro de su trayectoria. Ya sean paisajes o retratos, pinturas o dibujos, la obra de Bernardí Celiá nos transmite fuerza, energía y libertad en todos los aspectos posibles. En este caso es por la libertad de trazo en la realización del retrato, dando una sensación de espontaneidad y energía.
La obra presenta un grado de conservación óptimo y presenta un marco de madera con vidrio. Recomendamos enmarcar con passepartout.
Bernardí Celiá, 32.7 x 21, 7 cm, grafito sobre papel. Es un retrato de un personaje masculino. La composición es de un primer plano en el que el punto focal es el rostro. Con un trazo rápido y, presuntamente, continuo; Celiá ha elaborado un retrato rápido y expresivo. Todo el retrato parece abocetado, la nariz, los ojos, las cejas y la boca son insinuados.